Visitantes estadounidenses en Tulum han acusado a agentes policiales del municipio de extorsión tras ser retenidos en un control situado en la ampliación de la avenida Kukulkán, cerca de la costa. Según relataron, los oficiales les exigieron dinero para evitar su arresto, alegando que no llevaban la licencia de conducir en formato físico.
Los agentes pararon a los turistas para una revisión de documentos, pero al mostrarles una versión digital de la licencia, insistieron en que debían presentar el original. Como no pudieron cumplir con esta demanda, los policías advirtieron que esa falta justificaba una detención de 36 horas, a menos que pagaran 20 mil pesos mexicanos, equivalente a unos 1.100 dólares.
Bajo la presión de ser trasladados a una unidad marcada con “Blindaje Tulum” —vinculada a la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana de Tulum—, los turistas aceptaron pagar. El monto se cobró mediante una terminal electrónica con las siglas SSC-Tulum (Secretaría de Seguridad Ciudadana Tulum), dividiéndose en dos cargos a sus tarjetas: 273 dólares y 820 dólares.
Los afectados explicaron que se vieron forzados a ceder por la intimidación, ya que tenían un vuelo al día siguiente y no podían permitirse perderlo. Aunque intentaron explicar su situación, los agentes se negaron a liberarlos hasta que completaran el pago.