Para quienes disfrutan de una buena pieza de carne, encontrar un restaurante o asador donde saborear un chuletón de calidad es tan esencial como el encanto del lugar donde se encuentra. En el Pirineo Aragonés, combinar este placer gastronómico con vistas espectaculares puede transformar una simple salida a comer en una experiencia inolvidable.
Tras explorar redes sociales, sitios web y guías gastronómicas, hemos seleccionado ocho destacados restaurantes en esta región donde la carne es protagonista. La lista no es exhaustiva, ya que hay muchos otros sitios con excelente oferta, y animamos a los lectores a compartir sus recomendaciones favoritas para enriquecerla.
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El Balcón del Pirineo (Buesa): Famoso por sus chuletones de vaca y buey a la brasa, este lugar está en una tranquila aldea que ofrece vistas privilegiadas del Valle de Broto.
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El Duende (Torla): Recomendado por la Guía Michelín, este caserío de 1831 deleita con carnes a la brasa y chuletones de vaca que superan el kilo, en un entorno lleno de carácter.
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El Asador Portal de Ordesa (Sarvisé): Reconocido por su chuletón de Txogitxu, una carne de gran prestigio.
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Casa Fes (Aínsa): Aquí se sirven carnes ecológicas y locales, criadas cerca del castillo de Aínsa, disponibles también en una carnicería cercana a la calle Mayor.
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El Fogaril (Benasque): En el hotel Ciria, ofrece cortes de cordero, ternera y buey del Valle, destacando el chuletón de ciervo con salsa de vino de La Perdiguera.
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La Llardana (Benasque): Cerca del anterior, especializa en chuletones a la brasa cortados al peso, perfectos para compartir.
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La Borda del Mastín (Cerler): Su chuletón de vaca, madurado durante 30 días, es un plato estrella.
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El Rincón (Cerler): Popular entre esquiadores, este local es ideal para reponer fuerzas con sus carnes y chuletones tras una jornada de montaña, ya sea caminando o esquiando.
Todos estos sitios, ubicados en el corazón del Pirineo, combinan paisajes impresionantes con la posibilidad de disfrutar de los mejores chuletones.